VIENE MI AMIGO DEL ALMA

A finales de mes, viene mi amigo del alma, mi amigo Miguel, el que me llama cada día sin fallarme y ha estado viniendo cada mes, hasta que fue despedido junto al resto de las demás plataformas de Teletech, subcontrata de Vodafone España durante años y que se han llevado fuera. Entre las afectadas están Valencia, Toledo, Madrid, Barcelona etc...unos 1.600 empleados aproximadamente se han quedado en la calle, por culpa, de la famosa mano de obra, que sale más barata fuera de nuestro país. Han conseguido, que les paguen el despido de 21 días por año trabajado y por eso, viene cuando le ingresen el dinero. Nos iremos a repetir la fiesta con mi amiga a Albacete, de cine, cena, cafetería......, pero lo más triste, a despedirnos durante algún tiempo, porque me marcharé pronto y no podrá desplazarse tan a menudo a visitarme. Momentos de dolor y tristeza, porque somos amigos de los llamados tesoros, el que me salvó la vida una noche desde la distancia, cuando no se hacía conmigo al teléfono y removió cielo y tierra, hasta que vinieron los médicos de urgencias, ante la gran tontería de haberme tomado más pastillas de la cuenta. Nos queremos mucho y siempre estará pendiente de mi, aunque muchos km nos separen, pues él ha visto todo lo que me han hecho, el que tuvo que soportar que le dijeran: ¡ Llévate a esa mierda a Valencia! y otras cosas más...., pero también sabe, que me tuvo, cuando él me necesitó y hemos estado más para lo malo, que para lo bueno, algo que hace verdadero, intenso y real a un amigo, pues los que se van de juerga y a la hora de un apuro desaparecen o todo son excusas, esos no son nada.

Hay mucho daño dentro de mi, tengo esos momentos en los que se encargan de animarme, pero cuando vuelvo a mi soledad, mis heridas sangran sin parar y por eso me sacan de aquí, porque es una tortura diaria la que sufro y mi doctora se preocupa de que no empeore, por eso me voy y se han portado así conmigo, pues me encargué de pedir ayuda a los de arriba y con los informes aportados, no puedo estar más agradecida al interés que se han tomado en ayudarme y con la rapidez que se han movido.

Bien sabe Dios, el destrozo que me han hecho, algo que no puedo soportar aquí, ya no pueden seguir dándome más y más pastillas psiquiatricas, unas secuelas que permanecerán en mi cerebro de por vida, pero por lo menos, me alejaré de este negror que me consume y tendré la tranquilidad de salir a respirar el aire puro, de no ver a quienes me han fusilado y lo hacen cada día, con miradas de tirria, burla y miradas de nada.

Todo tiene un antes y un después, si la muerte no aparece antes, pero quienes me han llevado a ésto, me volverán a ver en un juzgado, para recibir con merecimiento todo lo que me han arrebatado. No siempre se equivoca la justicia y confío plenamente en mi abogada, para que se encargue de todo y limpie la suciedad tan grave que me han dejado, pero mi salud está por encima de todo y aunque yo no esté, ella se ocupará de mis asuntos, hasta el día esperado, para obtener una sentencia de culpabilidad hacia los que me han maltratado. Nadie se merece lo que he tenido que pasar, siendo que solo di amor profundo y verdadero, sin medidas, sin desconfianzas, sin traiciones, sin recelos, sin cálculos y olvidándome de mi misma, para hacer felices a ella y a los suyos. Me iré con una conciencia blanca y llena de paz, pues quien me tiró por un barranco en la enfermedad, no volverá a ser feliz en su vida, y no me queda la menor duda de que llegará a llorar con los años, verdaderas lágrimas de dolor, al darse cuenta en su pronta vejez, que no encontró a nadie jamás, que le entregara el amor tan profundo, intenso y verdadero, como se lo di yo, poniendo mi ser en sus manos de par en par, para venderme con el beso de Judas.