LA AVARICIA ROMPE EL SACO

El mejor partido de la vida es el AMOR, pero ese nadie lo quiere, confiamos en el hombre, que lo único que desea es dinero y poder, pero no para repartirlo con justicia, sino con la avaricia de llenarse ellos los bolsillos y los demás que se apañen como puedan. A lo largo de la historia los que han intentado ser buenos presidentes han muerto de repente o los han asesinado, pero eso pasó al olvido. Hoy todos son iguales, mucho prometer hasta meter y después de metidos nada de lo prometido. Hay que dar ejemplo con hechos, y si ellos se quitaran algo de sus escandalosos sueldos, por lo menos se les vería el detalle, pero intentar sacar la crisis, hundiendo a los más necesitados es imposible.

El problema en nuestro país es la falta de unión que tenemos todos, pues somos tan tontos, que nos atacamos nosotros mismos y encima los ponemos más contentos.

Nadie es perfecto, pero se puede hacer mejor política, si se quiere y se lo proponen, pero todos son iguales con diferentes collares, y encima de políticos que se aburren, cuando están en el Congreso y el Senado, son en gran parte accionistas de alguna empresa o empresarios...en fin...el mundo lo destruye el propio ser humano, porque lamentablemente es el animal más torpe que hay y que tropieza siempre con la misma piedra. Solo hay una solución para evitar más catástrofes, que Dios vuelva a enviar el diluvio universal y se construya una nueva arca de Noé.....,aunque se repetiría lo mismo, porque el dinero en abundancia, el poder, el sexo y el egoísmo, es la fe del hombre, que se cree que no van a morir nunca y que lo que existe es ésto solamente.

Todo es necesario en una sociedad, pero hay que saber hacer las cosas lo mejor posible, pues la perfección no existe y es imposible complacer a toda una nación, pero por lo menos poner buena voluntad, sin fastidiar a los que menos tenemos.