MIS PRINCIPIOS

Hoy se me ha dado un consejo y como tal lo he escuchado, pero jamás iré en contra de mis principios. Se me ha dicho que no me meta con la alcaldesa, para que la gente no me deje de lado y me quede sola....¿Acaso son todos unos hipócritas?, pues si son así, no son dignos de que me hablen, pues esos son los típicos traidores, que por la espalda apuñalan y en la cara te bailan los nanos. Tenía muy buen concepto de ella, la veía y me parecía buena persona y por eso la voté, pero lo que ha permitido que me haga su agente, después de hablar con ella dos veces, me ha dejado de piedra y a nadie le importa mi salud, no importan las personas, importan los cargos y ayudarse entre ellos. No pienso caer en el mundo de los gigantes monstruosos, que se dedican a perseguir a los inocentes, solo porque vivimos en un país lleno de injusticias y sin amor de ninguna clase.

Cuando desayuno en una cafetería y veo a mi lado en la otra, que van los que se creen superiores y prepotentes, a todo el juzgado, al ayuntamiento, que son así, casi todos en general, y es en donde me niegan la entrada sin motivos ni razón, pienso que discriminan a los minusválidos, o porque me consideran una guerrillera problemática, gracias a los chismorreos que no fallan; sin pensar que mañana se pueden ver ellos como yo y darse cuenta de que tengo sentimientos y que soy una enferma víctima de mucho, e inocente de todo, pero los verdaderos delicuentes son mejores tratados y escuchados.

De verdad, que me siento impotente de ver lo que veo y lo que me están haciendo, pero no tengo miedo, porque ya estoy cansada de que me pisoteen. Llevo unos días con una fuerte infección y muy débil, pues no como y solo quiero estar acostada; me meto a mediodía en mi casita y procuro no salir, para recuperarme un poco, estoy esperando a que me operen el bulto de la espalda y solo tengo ganas de que llegue el día 21 y ver a mi psiquiatra, pues ella sabe lo mal que estoy y toda mi historia, pero aunque me quiten la salud del todo, jamás dejaré de luchar por aquello en lo que he creído siempre, y que se llama JUSTICIA, pues tengo el mismo derecho que los demás, y no soy una enajenada mental.

La persona de la que nace toda mi pesadilla, no pasa desapercibida para Dios, pues no hay calificativo en la tierra, que describa lo que me ha hecho, pero puede estar segura de que cuando llegue la hora en que se le despierte la conciencia, no volverá a dormir tranquila jamás en su vida por mucho que se engañe a si misma, pues surgirá el milagro de que el infierno que estoy pasando, sea pagado por los culpables de todo y que se dónde están y quiénes son, empezando por ella misma.