TENGO MUCHA AYUDA

Cada día tengo más ayuda y se preocupan mucho por mi, pues saben lo que necesito y me conceden las necesarias para llevar una calidad de vida adecuada y ahora ya me viene también por la tarde mi auxiliar. El ayuntamiento me ha dejado una accesibilidad estupenda en mi casa y hay gente que me quiere mucho, el pueblo se adapta a mis circunstancias y lo más  probable si no pasa nada, es que me quede, pues lo tengo todo a mano, la gente en su mayoría es amable y humana y es que el tiempo va poniendo a cada uno en su lugar.

Se que hay muchas personas que me consideran un monstruo, pero ya no puede importarme, porque voy drogada de medicinas y no pienso en ellas aunque quiera, cuando estoy bajo los efectos. Desde aquí puedo viajar y marcharme a dar una vuelta por la capital y regresar a la hora que yo le digo al autobús y lo que pago ahora, es una diferencia notable al infierno en donde habitaba y todo es más adecuado para mi movilidad.

Mi auxiliar es la mejor que me podrían haber puesto, pues me trata con mucho cariño y es toda una humana profesional, que solo piensa en lo mejor para mi y no la cambio por nadie, aunque cuando ha tenido que faltar, tampoco me puedo quejar de las sustitutas, pero ella es la mía y no la cambio por ninguna otra. Me conoce muy bien y la obedezco en todo, porque quiere que llegue a hacerme mayor, antes de acabar en una residencia de discapacitados.

Ella vendrá al hospital cuando me toque ir por algún motivo gratis, pues tengo derecho a ese servicio por mi gran dependencia y los servicios sociales se portan muy bien y estoy muy agradecida a la rapidez con la que intentan hacerme las cosas.

Aquí me siento muy bien atendida y en cuanto dejen de ensañarse conmigo y reciba la justicia que me corresponde como a los demás, las pesadillas habrán acabado y podré llevar una vida tranquila.