Entre las paredes de mi intimidad, dejo volar mi alma, para que me contemple desde fuera y me hable sin parar, me dice y me cuenta lo que debo de hacer y por aquello que tengo luchar, un encuentro conmigo misma, pero con la voz celestial, que me guía por el buen camino, de la justicia y la verdad. Nadie que sea profundo y diferente es considerado del mundo actual, eres como un extraño fuera de lugar. Es difícil encontrar quien sepa discernir entre el verdadero amor y la satisfacción sexual, no entiendo a quien entrega su cuerpo para recibir placer, dejar que se se unan fluídos sin sentimiento alguno, para después desaparecer y no haber entregado el amor sublime, que se da con el corazón, el alma y todo tu ser, ¡qué miseria tan grande debe quedar, cuando al terminar no te susurren y te demuestren ese amor de verdad!. El cuerpo, el cuerpo, es la tapadera de nuestro espíritu, el que es real y manifiesta la belleza que se puede valorar, y conservar para toda la vida, una mente sana y sabia, que sabe comprender lo que es el sendero del diablo y el que te lleva por el dulce caminar hacia la dicha eterna, entre flores de arco iris y espinas que se destruyen con la fuerza del gigantesco abrazo del amor, que todo lo vence.
Ya nadie quiere eso, aunque digan que si, pues quieren cambiar buscando la perfección los más imperfectos, y hacen promesas para dañar, pensando en si mismos, en lo que quieren y necesitan para ellos, sin pensar en nada ni en nadie más.
Solo el tiempo y las canas que van apareciendo, pueden hacer reaccionar, pero quien tiene un corazón duro, aún empeora más, pues murmura, despotrica, mete cizaña, amarga a quien sea, el mal genio le domina y todo aumenta sin parar, por eso, hay mucha diferencia entre ancianos dulces que han sido igual en su juventud y los que rompen matrimonios por dominar de forma aumentada e inadecuada, con el chantaje emocional.
Somos con mucho aumento, igual que en otras edades, pero si no es por enfermedades mentales, es porque la maldad se hace más vieja y aumenta con el tiempo a peor....... y si es la bondad le pasa lo mismo, pero ésta las convierte en ancianitas dulces, que no miran más que por la felicidad ajena.
Es muy difícil cambiar, pero no imposible, aunque las estadísticas de las experiencias que se viven, demuestran.....que a la oveja le tira el monte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Te invito a expresarte, a que digas algo o dejes la huella de tu presencia de alguna manera, puedes elegirla a tu gusto.
Respétame y serás respetado y te invito a suscribirte, para verte entre mis amigos.
Para mi, sería un placer conocer tu opinión o lo que sientas, pues los comentarios son el alimento y la gratitud de poder seguir compartiendo.
Opinar es gratis y no cuesta dinero, os invito a hacerlo libremente.
Gracias y besitos sea lo que sea, que hayáis decidido...