Son muchas las religiones que existen en el mundo, pero la que yo tengo y practico es exclusivamente mía, sacada de mis vivencias y de lo que aprendí, cuando estuve diez años en el camino neocatecumenal, conocido también como las comunidades o los Kikos de la iglesia católica. Lo dejé, en el paso del Padre nuestro, me eligieron como catequista de ellas y tocaba la guitarra en misa de ocho, pues mi amigo el sacerdote, no tenía a nadie, para que se cantara los domingos por la tarde en ella; enseguida que empezó a llenarse la iglesia, me quitaron las comunidades mayores y se pusieron los cantores de las mismas dejándome fuera, y eso, me fue desengañando, con otras cosas que no podía comprender, no entendía y acabé eligiendo mi propio camino, pero con la gran gratitud de haber conocido a Jesucristo. Tengo muy claro, que cada cabeza visible de las diferentes religiones que hay, ha interpretado la Biblia de una manera distinta y de ahí, que le hayan puesto variedad de nombres y con las conclusiones humanas, que son las más erróneas que hay.
Mi religión es la siguiente, pero el nombre me da igual, pues se puede llamar como os guste y a continuación os la voy a explicar.
Creo en Dios aunque no lo haya visto físicamente, pero lo siento en mi corazón y en como me lleva de su mano, para no caerme; pero si resbalo, o me ponen la zancanilla a traición o con maldad y caigo peligrosamente, me coge fuerte con sus brazos y se queda con la cara de quien ha tenido ese comportamiento ...
Creo en una sola Virgen como madre de Jesucristo y que era el hijo de Dios, enviado a la tierra, para darnos ejemplo de amor y su vida por todos nosotros, pero lo de ponerle a su madre distintos nombres, por las apariciones que hizo o cosas así, me parecen respetables, aunque solo hay una virgen y se llamaba María.
Creo en los milagros, porque en mi, los hizo; también en que hay otro lugar, pero tiene distintas moradas, aunque el paraíso, puede empezar en la tierra si el hombre quisiera...
No voy a la iglesia ni a misa, porque no adoro las imágenes de los llamados santos, ni las riquezas que veo en ellas. Tan solo me motiva una cruz de madera, para hablar con mi Padre del cielo o estar a solas y darme cuenta de que era el AMOR PERFECTO y que siempre es el culpable de lo que el ser humano decidió ser y hacer, porque nos creó iguales a todos...
Lo respeto todo y me encanta escuchar el pregón de un sacerdote si es bueno, cuando por casualidad me he he visto en una misa, aunque pongan al cura verde después, pues no los juzgo al considerarlos hombres como todos; pero los hay muy buenos y puestos al día.
Mi religión es llevar al Señor en mi corazón y manifestarlo con hechos, aceptar su voluntad lo mejor posible; cobijarme en Él, que todo lo puede y hace posible lo imposible, nos deja libres, pero nos escucha y somos su debilidad cuando siendo adultos, tenemos la inocencia de los niños.
El Señor es mi pastor y me guía por el valle de la verdad, ha consentido que comparta su cruz, para darme cuenta de lo mucho que nos amó y perdonó; por eso, aquel que la haya vivido, recibirá la gloria de la resurrección y como bien decía: DAD A DIOS LO QUE ES DE DIOS Y AL CESAR LO QUE ES DEL CESAR, quien lo sepa interpretar, sabrá el significado enseguida y espero, que asì sea. Hay que tener discernimiento, para interpretar la Biblia y no hacerlo literalmente, pues el que lo haga así, le llevará a confusiones fanáticas dañinas, por eso, la homosexualidad, no la rechaza Dios, lo que no acepta en cualquier inclinación sexual es el pecado del libertinaje perverso, pero admite el verdadero amor en lo bueno y en lo malo de las personas profundas, sensibles, que lo saben sentir y practicar, que no son capaces de matar y de apedrear, de tratar malamente a sus parejas y confían con bondad, para darlo todo sin medidas, pero se encargará si eres especial, de pasarle la factura a la mayor brevedad, aparte de la terrenal, aunque si ésta no la ve necesaria, con la suya, hay gente que ya tiene bastante siendo como es...
Hay quien dice ser ateo y de eso no tiene nada, pues obra con amor y no ha descubierto, que lleva a Dios en su corazón, le está hablando y la sordera no le permite escuchar sus toques, pero SÍ, se deja llevar con sus buenas acciones.
No importa el nombre de la religión que sea, lo que importa realmente, para ser imperfecto, pero perfecto....,es llevar a cabo los Diez mandamientos, porque resumen lo que le falta al mundo...y que se aprenden y enseñan con el corazón y el alma...Así, lo siento, lo pienso, lo vivo y respeto a los demás, aunque digan que no creen o llamen de otra manera a Dios, siempre y cuando, tengan buen corazón y no juzguen, mientan o insulten sin razón, porque por encima de todo, dejo libre a la gente, pero si escribo y alguien se siente identificado, no es mi culpa, no hago daño de forma premeditada y tampoco guardo rencor, si en algún momento, alguien me aportó algo positivo, pues me quedo con ello y nunca le desearé nada malo....., pero soy humana y tengo profundos sentimientos, por eso me domina la ingenuidad y el que puede, porque me cala bien, me hace daño....
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