QUIEREN MIS RIQUEZAS, LAS REGALO Y ME LAS RECHAZAN

Os resultará sorprendente lo que voy a deciros, pero os puedo asegurar que es cierto como que existo, que hay mucha gente en este pueblo, que me envidia; de hecho, en los servicios sociales se quejaban de no tener lo mismo que yo y protestaban por ello. Resulta que envidian mis males y a mi me encantaría donarlos todos sin cobrarles nada, pero eso es mucho más que envidia, es de ser de otro planeta en donde no tienen conocimiento humano, el cerebro es de serrín y el corazón es una morcilla más negra que el luto de una madre, ¿sabéis por qué me envidian?, pues porque les gustaría verme encerrada en mi casa, pudriéndome en la porquería, sin conocimientos y sin saber defenderme, sin luchar por nada y más mal, que cuando habitaba en donde me tenían como a un cerdo en su cuadra.

Me miran la silla y unos lo hacen con burlas y a otros les encanta, pues soy un poco infantil y me gustan los juguetillos, pero esos que se ríen están en un pozo putrefacto, porque no saben como acabarán y si llorarán por no tener nada.

Lo peor de lo peor, es ser ignorante, inculto y encima malo, con eso es para llorar ellos mismos, del castigo que ya tienen, pero no se dan cuenta, pues los ojos los tienen de adorno y miran a donde no deben, porque son los peores y así se divierten, como los que viven con el diablo después de la muerte.

¡Vaya con Casas Ibañez!, que suerte voy a tener, cuando regrese a la civilización normal, en donde por lo menos existe la educación y la cultura, o no, pero con humildad. La gente estupenda de aquí es maravillosa, por eso me llevaré de todos ellos un grato recuerdo y el cariño recibido, pero por los demás, que he tenido el horror de conocer, saldré como la bola de un cañón, explotando para todos ellos y que descansen en paz en sus propias tumbas, porque están muertos de la maldad que domina la sangre que corre por sus venas. Este pueblo no tiene nada que ver con lo que digo, es la gente la que lo hace así; por donde voy cuando salgo fuera de él, lo ponen verde por ese motivo y es que cuando el río suena tanto, es porque algo de agua lleva. 

MI AUXILIAR Y AMIGA ISABEL CON SU FREDDY CUANDO FUÍMOS DE EXCURSIÓN A LA VIRGEN DE LA CABEZA CON MIS PEQUEÑOS