SOLO MIS PEQUEÑOS

Solo salgo lo justo, para desayunar, sacar a mis pequeños o comprar; cada día me apetece menos estar en la calle y más en mi casa y cuando estoy en ella, la mayor parte del tiempo duermo sin parar de tantas pastillas como tomo. La verdad es que dormir y no sufrir es lo mejor, porque no me encuentro nada bien y deseo con locura marcharme de aquí. Cuando anhelas tanto algo, el tiempo parece que se detiene y siento una angustia enorme en este lugar, que no me deja casi respirar. 

Ahora, que ya me han puesto las ruedas delanteras nuevas, quiero irme a Valencia por asuntos importantes, lo antes posible, pero no estoy en condiciones de hacerlo ya, pues me siento débil, no veo bien y camino bastante atontada por la medicación. Necesito otro cielo azul, otro frío de invierno, otra gente a la que ver, una vida diferente, una oportunidad para volver a sonreír y que mis ojos acaben mirando un rostro bonito, al tener esa mujer que me espera en algún sitio, la belleza interior que necesito. No quiero hacerme vieja, sin conocer a ese ser que me ame como yo a ella, que me haga vibrar con sus caricias, recibir ese beso que no conozco lleno de pasión y entrega, quiero a mi alma gemela, para convertirnos en una sola y que vivamos ese amor verdadero como personas adultas, en la alegría, en la tristeza, en todo lo que conlleva los senderos de este mundo, con nuestra arma invencible que nos una con las cadenas del sentimiento real, más hermoso y  único, que nada lo puede romper, porque tendrá las raíces muy fuertes y sólidas, para que vaya creciendo con más intensidad y no podamos vivir la una sin la otra.

Quiero conocer un poco de felicidad, antes de partir; que mi sueño se haga realidad y deje a un lado las pesadillas que me torturan, que no me dejan pasar la noche y me llenan de miedo, ante ese monstruo retorcido y malo que carece de todo, junto a su pandilla, que se ensañaron conmigo a base de malos tratos y agresiones de todos los tipos, por eso me drogan y duermen mi mente, para no sufrirlas y tener que acabar en urgencias. Solo pido que se me lleven, que se me lleven de este lugar, que ha sido una maldición para mi, pero desde luego, ante el cartel que me han colocado, también conocerán la verdad de los hechos y que ella oculta, porque no sabe hablar más que de mentiras, con el grave problema de una familia, que también me han difamado y calumniado por culpa suya, de todo lo que se ha inventado y que son brutalidades espantosas, pero se ha sabido aprovechar bien de mi indefensión y porque es de aquí, pero ya van sabiendo la verdad, aunque la conocían bien, pero tiraban la piedra y escondían la mano, igual que hace ella, para hacerme de todo lo que ha podido, simplemente porque me quedé en silla de ruedas, que hasta me negó, porque eran más importantes las paredes.