Hoy me marché lejos, muy lejos, más allá del cementerio, y entre una preciosa pinada disfrutando de la naturaleza, para reflexionar las cosas que tengo que hacer y que están pendientes, he llegado a conclusiones muy sabias, pero no os las puedo decir, porque son demasiado importantes.
Mientras miraba el cielo y aquellos verdes pinos, me he quedado dormida y he visto algo horrible, pues me ha dado una sacudida mi cuerpo y me he despertado enseguida, pero me desperté convencida de que era muy bueno y que me daría una paz muy grande y una felicidad maravillosa hacer realidad lo que había visto. Llegué a la conclusión de que el día, la hora y el momento era cosa mía y que la dueña de elegir la ropa que quisiera también, así que dando besos a mi madre, me despedí de ella, regresé a mi casa y con la satisfacción de haber aprendido una gran lección.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Te invito a expresarte, a que digas algo o dejes la huella de tu presencia de alguna manera, puedes elegirla a tu gusto.
Respétame y serás respetado y te invito a suscribirte, para verte entre mis amigos.
Para mi, sería un placer conocer tu opinión o lo que sientas, pues los comentarios son el alimento y la gratitud de poder seguir compartiendo.
Opinar es gratis y no cuesta dinero, os invito a hacerlo libremente.
Gracias y besitos sea lo que sea, que hayáis decidido...