QUIERO AMAR COMO HE AMADO

No consigo enamorarme de nadie, tengo tanto miedo, que ya no soy capaz de sentir el amor tan inmenso, que me robaron sin permiso, solo quiero desaparecer y el tiempo no corre cuando debe hacerlo, cada vez me noto más asqueada y sin ningún aliciente que me de la estabilidad de un poco de dicha. Me siento perdida sin rumbo, sin gente de mi edad, sin un calor de hogar, sin nadie que me abrace y me haga llorar de felicidad, que mi corazón lata con fuerzas y penetrar en el espíritu de mi alma gemela. No tengo forma de reconstruirme, de que pueda volver a sentir lo más grande que ha habido en mi interior y que solo he entregado una vez. Quisiera que los días se convirtieran en minutos y que mi destino sea poder salir de donde la rutina de tanto dolor me acompaña, porque solo tengo por amigo el sufrimiento, aunque resista y me consuma por dentro.

No puedo seguir así, noto que nada me importa, que quisiera huir de todo y echar marcha atrás, para subir en la máquina del pasado y volver al año 2007, no haber entrado nunca en un chat y no haber contestado jamás a quien me abrió aquella ventana, para engañarme en todo y seleccionarme para utilizarme con mentiras, recelos,  desconfianzas, con protección y sin dejarme entrar en su corazón, porque entre sus falsedades me prometió no hacerme daño nunca y que siempre estaríamos junticas, pero del dicho al hecho hay un trecho y fui la cabeza de turco de una persona que no sabe amar ni puede hacerlo, y en lo malo recurre a lo que sea para tirarte de su lado.

Debo irme y espero que el Señor me lo permita, cuando todo se cumpla y pueda hacerlo, pero por ahora no tengo más remedio que pasar aquí una larga temporada y tendré que soportarlo como sea, hasta que coja mi ligero equipaje y ponga distancia por el medio, de un lugar que me ha dejado el sello de la crueldad, de las agresiones, de la infidelidad, de las maldiciones y de una traición sin límites, por alguien que por donde fuera tendría que ir besando todo lo que hice por ella y su familia, sin saber que era una enferma inadaptable y con el pensamiento de que todo ladrón se cree que los demás son de su misma condición.

El peor castigo que puede tener un ser humano, es la prepotencia, el orgullo y mirarse al espejo, para ver una realidad que nunca reconocerán, lo desgraciadas que son y que se las come la edad y la soledad por sus malas acciones, y sin conocer el arrepentimiento para pedir perdón y morir con las arrugas de sus pecados, sin nadie que esté a sus lados, para morir y rendirles cuentas a la verdad del mundo....