ASESINATOS EN EL HOTEL 1ª PARTE

En las afueras de una ciudad de Londres, cercano a las montañas y a un río muy famoso que pasaba por allí, se encontraba ubicado un hotel, que estaba regentado por una señora mayor, que parecía muy atenta, simpática y que lo mantenía muy limpio y cómodo gracias a sus dos trabajadoras.

Las dos empleadas que tenía se encargaban de los cuidados de todo el hotel; que no era muy grande, reponían las toallas, los demás artículos en las habitaciones, las dejaban en condiciones y nunca aceptaban propinas por orden de la dueña, que de ninguna manera se las permitía, bajo amenaza de despedirlas.

Estas chicas odiaban profundamente a la señora por este motivo y por lo poco que les pagaba, la aguantaban porque necesitaban el trabajo y no querían trasladarse a otro lugar más lejano.
Tenían allí sus propios dormitorios, les daba de comer lo justo y llevaban muchos años con ella trabajando. 

Una se llamaba Claudia, era antipática y no soportaba a los jóvenes, pues cuando tenía 16 años había sido violada por cuatro chavales enmascarados, que la dejaron tirada en medio de un campo. Aquello la dejó muy marcada y llena de odio hacia los hombres de esas edades, su rencor y las ganas de venganza la mantenían viva y desde entonces sufría un gran trastorno psicológico.

La otra se llamaba Aghata y conocía toda la historia de su compañera, porque ella se la había contado, confiaba en su silencio; y es que ésta, con mucha gracia, se la supo ganar para que le contara todo el dolor que llevaba dentro.

Aghata era hipócrita, callada, con mirada aparentemente dulce pero misteriosa, le gustaba registrar la habitación de la dueña y cuando se quedaba sola, murmuraba los peores deseos para la vieja.

Cuando llegó la buena época, se desplazó un grupo de jóvenes amigos, para poder ir de pesca al río que estaba próximo y respirar el aire puro de las montañas.

Aquellos chicos y chicas se hospedaron en el hotel bajo la mirada obscura de todas ellas, éstos no se daban cuenta de nada, porque eran felices y querían divertirse.

Una noche en la que se fueron a nadar desnudos, encendieron un fuego y se pusieron a asar un poco de carne para cenar. Cuando terminaron se percataron de que faltaba uno de los compañeros y se pusieron a buscarlo, pero no le dieron importancia porque creyeron que había regresado al hotel para descansar. 

Cuando volvían satisfechos de lo bien que lo habían pasado, en el camino se lo encontraron muerto sin signos de violencia, ni de heridas y ni de haber intentado defenderse ante una agresión.

Lo recogieron y se lo llevaron en hombros; y cuando llegaron al hotel, llamaron al médico, que tras reconocerlo, certificó que había fallecido de un infarto al corazón.

La policía del lugar, se encargó de avisar a sus padres y se trasladaron para recoger el cadáver del hijo y llevárselo para enterrarlo. Los padres no daban crédito a lo sucedido y se quedaron destrozados; pensando que aquello parecía imposible. Nunca había padecido enfermedades, era deportista, pasaba sus controles y les decían que tenía una salud de hierro.

Ante la tristeza de lo ocurrido, los demás se fueron para darle el último adiós a su amigo, por lo que tuvieron que suspender las vacaciones.

A la semana siguiente, llegó otro grupo de chicos con sus respectivas novias y se registraron en el hotel, para disfrutar con ellas, salir a cazar, bailar, bañarse y vivir con alegría el amor que se les notaba en las caras.

La vieja les producía cierto desconcierto con sus miradas, las limpiadoras no les quitaban los ojos de encima y ellos con la felicidad de la juventud, no le dieron importancia y continuaron con su alegría y las ganas de diversión.

Por la noche al ir a coger el coche, comprobaron que las dos ruedas traseras estaban pinchadas....Continuará