Mi silla eléctrica son las piernas con las que camino sola por la vida, cogida de la mano de Dios, pero soy humana y me lamento, lloro y sufro, me quejo y le reprocho, pero después le abrazo fuertemente con mis súplicas y mi diálogo silencioso, a través de mi corazón. Reflexiono y pienso mucho en todo el Amor que me tiene, aunque los que no creen en nada, me dicen que si existiera no me habría dejado así, o no dejaría que triunfara el mal en el mundo. Mi respuesta siempre es tajante, nos dio lo mejor y el ser humano lo rechazó, porque quiere ser más que Dios y servir a otro Señor, que disfruta destruyendo el interior de las personas, dándoles lo que se creen que es la felicidad y los deja igual de vacíos y peor que las fieras salvajes, que acechan para matar y comer. Siempre buscando culpables a los hechos malignos, que se llevan a cabo por puro egoísmo y malas entrañas, el mal elegido libremente, porque a lo único que hemos llegado es a no ser racionales como los animalitos de compañía, que muchos abandonan y torturan y son un ejemplo a seguir en Amor, lealtad, fidelidad, entrega, nobleza, educación y sensibilidad, bellezas llenas de ternura, que no te miran exteriormente y sienten una gratitud inmensa, como la confianza que te entregan, poniendo sus vidas en nuestras manos. Nunca he criado a mis pequeños como animales, los he educado como personitas que entienden más y mejor, les cuento todo con dulzura y si los tengo que reñir lo hago explicándoles lo que han hecho mal, pero saben que los adoro y que los quiero con locura, se dan cuenta de todo y me ayudan, me besan y me consuelan compartiendo mis lágrimas, y mis momentos en que les sonrío y saltan de alegría, ellos si son humanos, porque tienen y pueden sentir lo que aquí en la tierra han matado las personas, para buscar una felicidad equivocada en todo lo que les deja sin nada y los transforma en seres maliciosos, capaces de todo, por elegir el camino erróneo en donde están convencidos de encontrar lo que buscan. ¡EL AMOR AL PRÓJIMO!, esa es la única riqueza que existe y se desprecia continuamente, porque la ceguera de las almas no quieren volver a ver otra vez, solo desean los placeres materiales y carnales, para acabar amargados y pagarlo con los inocentes, a los que consideran raros como yo, porque luchamos contra el desamor, las injusticias y la discriminación, pero ojo, no se deben confundir las palabras, pues si alguien comete un delito lo paga de alguna manera, pues cuando adviertes y se recrean, para eso existe la justicia en la tierra, aunque perdones las desgracias que ya poseen, con sus maldades bestiales y crueles.
El que esté libre de pecado que tire la primera piedra, pero también en cierto que para el cielo, no son tomados en cuenta los errores cometidos sin maldad, y con quien tiene mucha inocencia por saber amar, confiar y no quiere cambiar su corazón por uno de piedra.
Mi blog no tiene alegrías, no lo he creado para la diversión, tampoco para la presunción, solo es una vida real compartida con el mundo, con la verdad por delante, aunque sea para tirarme tierra en mi propio tejado.
Caminando con mi silla voy; sola, porque así me siento aunque vaya acompañada; rota porque me han destruido a pedazos; pegada y amenazada sin haber hecho nada; agredida con ensañamientos, porque supe amar y me olvidé de mi misma para darme toda yo; rara porque hablo de Amor y humanidad y es como insultar; diferente, porque no puedo irme a la cama con nadie, sino es por el más grande y profundo amor que nadie puede sentir ya, pero por ser especial, me han engañado y me han llevado al paredón, para fusilarme sin consideración, con acusaciones brutales, malos tratos por enfermar, burlas, cinismos y traición, ¿pero sabéis una cosa? aún confío en mi Padre celestial, que me dará la gloria con la resurrección, de la sabiduría en la justicia terrenal.
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