Es costumbre decir: Que quien siembra amor recoge el mismo fruto, pero yo no estoy de acuerdo con esa frase, pues en tierra que no es fértil, no hay nada... y si encima es de mala calidad, puedes recoger veneno en vez de amor, habiendo plantado una buena semilla. De donde no hay, no se puede sacar y tampoco le puedes pedir a un cactus, que te de caramelos, por eso, en este mundo es más fácil curar la locura, que una mente retorcida. A los seres humanos de hoy en día y de ciertas zonas todavía más, les hace falta ensayar muchísimo y ponerse ciertos zapatos, para poder poner en práctica los valores divinos que se nos regaló y llegar a ser personas con sensibilidad y profundidad, que sepan reflexionar, equivocarse, pedir perdón, adquirir esos valores que nos hacen ser racionales y valientes, para dar la cara ante las malas acciones y no esconderse como cobardes, por temor a las posibles represalias, que pueden poner de manifiesto ciertos personajes debido a sus cargos y de una forma muy clara, pero si todos hicieran lo mismo no existirían las cárceles e iríamos con pistolas igual que en las películas del oeste.
Ni tan siquiera soy capaz de juzgar, a quien se toma la justicia por su mano, pues hay asesinos que han sido eliminados por cualquier padre, madre, hermano o familiar y me cayo la boca, porque hay ponerse en la piel de quien tiene una hija y le han hecho de todo antes de matarla brutalmente y saber lo que se puede llegar a sentir, para actuar de esa manera, pero todo eso, ocurre porque cada juez tiene su propio criterio, siendo que hay un solo código penal con sus artículos y las penas correspondientes, aunque se puedan aplicar los atenuantes que procedan...
Creo que España tiene mucho que aprender y ser más avanzada en cosas realmente imprescindibles, para la vida del ser humano y no estar cavilando todo el tiempo en como fusilar al prójimo, cuando en esos ojos hay gigantescas piedras y no se las ven ni se las notan....
Es más fácil ver el polvo de la casa del vecino, que ver la basura tan grande que hay, en la casa de quien se pasa el día espiando y cotorreando matando de alguna manera...
En verdad que dices siempre las cosas más ciertas que pueda haber, y no es menos cierto que en este país la gente acostumbra más a vivir pendiente de la casa ajena que de la propia y no se dan por aludidos por muy directamente que se lo digan. Pero yo he llegado a la conclusión de que eso suele pasar aquí y en todas partes, aunque sí que reconozco lo arraigado que está por nuestra tierra.
ResponderEliminarAunque no siempre te comente, te digo que paso a leerte.
Besos!
En las capitales se nota menos, pero también hay, lo que pasa en que hay zonas y zonas donde pueden destrozar a una persona...Besos
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