DETRÁS DEL SILENCIO

Muchas cosas, se pueden poner de manifiesto detrás del silencio, por ejemplo: Una forma de refugiarse en el interior, entrañas que corroen malas acciones y dejan inquietud constante, no mostrar aprecio, estar enferma o enfermo, tener una fuerte preocupación o estar con una depresión, que no te deja hacer nada o por el contrario, expresas lo que sientes y vives, con medios como éste. Según la forma de ser de cada uno, la reacción es distinta, por eso, en quienes saben, que la conciencia la tienen más negra que el luto de una madre, es una forma de estar viva, pero no viven por el desazón que llevan arrastrando y encima se montan historietas, para aparentar lo que no tienen. La experiencia, es una gran libro para aprender, pero solo si se tiene capacidad de comprensión y se sabe utilizar de manera positiva, para no caer en las mismas trampas una y otra vez, aunque a veces, las circunstancias de no tener maldad, te juegan una mala pasada, pero al final, se consigue el objetivo y lo pones en práctica sin dejar de ser una buena persona, que lleva la gracia de Dios en su corazón. 

Dios nos hizo a todos iguales, pero después cada uno elige como desea ser, y es ahí, cuando la persona es de un carácter bondadoso e intenta ayudar incondicionalmente al prójimo o elige ser un pedrusco, que solo se ama a si mismo y le importa un pimiento si tiene que cargarse a alguien. Solo el que todo lo puede, conoce en realidad lo que llevamos dentro y si lo que demostramos es real o mentira, pues lo peor del mundo, es querer aparentar, para aparentar lo que no se es. Hay mucha gente buena todavía y si de algo me he dado cuenta, porque lo estoy viviendo, es que ahora, que no llamo a quienes se han pensado que soy una pesada, resulta que me llaman todos los días, por lo que está claro, que hay una contradicción en esa forma de ser tan peculiar, que no tiene lógica. Cuando hablo con mi psicóloga me siento cómoda, comprendida, sabe ya como soy y muy poco ha tardado, para darse cuenta, de que no actúo nunca de mala fe, pero si, que soy una mujer muy sensible, que le gusta demostrar su cariño o su estima, a las personas que le dan a entender que son profundas y sinceras. Ahora, me encuentro mejor desde que he guardado reposo y estoy contenta, porque me han llegado mis horas de asistencia domiciliaria de los servicios sociales como las tenía antes, y mi auxiliar y yo, nos hemos tomado un cortado y hemos fumado un cigarrillo juntas, porque es un encanto y me cuida muy bien, aparte de contarme cosas graciosas que me hacen reír...