LA PRIMERA MEJILLA QUE PUSE

Estaba tan ciega por el amor que sentía, que todo lo aguantaba y encima de ignorarme y no tratarme como a un ser humano, que estaba sufriendo, cuando me echaron a la calle y me dejaron sola e indefensa, me sentí morir de pena y lloraba sin parar, porque me decía a mi misma, que todo era una pesadilla. Antes de descubrir la maldad, la traición, la infidelidad, el robo y los ensañamientos a los que me sometieron y al juicio más cruel y lleno de mentiras, aún esperaba cada día un arrepentimiento y un te ¡quiero vida mía, no puedo vivir sin ti, perdóname por todo, porque no se lo me ha pasado!.

Fue tanto lo que confié en ella y tan verdadero mi amor, con hechos y olvidándome de mi misma, que la esperaba a cada momento, pero nada obtenía con el paso de las horas y del tiempo. Mantuve colgadas de mi cuello las alianzas que compré, para ponerla sobre su dedo y jurarle mi amor eterno, pero no había nada, solo los palos más crueles y canallas que nadie se merece, la tirria porque había otra, las burlas y los insultos, brutalidades impropias de gente con entrañas sanas, corazones endiablados que me escupieron sin piedad y que me llevaron con calumnias y mentiras delante de un juez, dispuesta a encerrarme en cualquier sitio y hacerme desaparecer. 

Solo había en mi mente tormento y espadas de ensañamiento, que al final me hicieron abrir los ojos y ver la realidad. Me habían robado todo, aprovechándose de alguno de mis viajes al hospital, se quedaron lo que quisieron para utilizarlo con toda premeditación y llevarme al hundimiento total.

No le doy a pasar a nadie, enamorarse por primera vez, convencida de que no te engañan y de que has encontrado a la mujer de tus sueños, con una madurez en años y el interior que buscabas, que sin verla fea para nada, por ese amor tan intenso la conviertes en un monumento y solo es una bruja, que me abandonó en la enfermedad sin ninguna pena y quedándose igual que estaba.

Ha sido demasiado dolor descubrir, que esa mujer que no me gustaba y me enamoró  locamente, era una canalla muy mala y sin pensamientos decentes.

A mi nadie me perdió, me tiraron a la basura, porque estaba enferma y ya no le servía, era solo un estorbo, pero quien se posó enseguida sobre ella, salió disparada porque no le dio ningún valor y no pudo sentir nada, más que el morbo de estar con una anciana a su lado y no dejar ni señales.

Un pasado, que casi me mata, pero ahora con la gran ayuda de mis profesionales, ya veo muy poquito, pero algo allá muy lejos, que se llama un horizonte nuevo, en donde seré recompensada y ella se habrá quedado sola, porque ha nacido para eso, por no saber el significado de nada y mucho menos de la decencia y de la honradez.