LA MAQUINA DEL TIEMPO

Si pudiera dar marcha atrás en el tiempo, no querría que hubieran pasado estos casi cinco años, que son la peor pesadilla de la historia de mi vida.

Un ayer lleno de dolor y sangre en mi interior, que maldigo constantemente por la hora en que me enamoré por primera vez y que me ha dejado la marca de todo lo habido y por haber.

No dejaré que la hija de la traición, del trato inhumano y cruel me lleve a la cárcel de la muerte, pues la sombra del terror me persigue y no me deja olvidar todo lo que he pasado y sigo pasando, pues ésto parece una obsesión por hacerme desaparecer del planeta.

Me siento limpia en mi interior, siendo inocente me maltrataron, me escupieron, me hicieron de todo y cambiaron la historia como siempre ha sido costumbre ajena, la de pasar la otra persona de culpable a víctima.

Menos mal que Dios no me deja y le da a cada uno lo que se merece, pues la justicia divina empezó hace ya algún tiempo y sigue adelante.

Las peores navidades de mi vida son este año, aunque en mi corazón siempre nace el niño Jesús, pero este año dormiré con mis cantidades de pastillas, para no recordar todo el infierno de un Amor falso y tenebroso que me odia y quisiera verme bajo tierra, para no recordarle sus acciones.

No hay paz para los malvados y si la tienen, es porque carecen de conciencia y solo miran por ellos mismos sin importarles a quien se lleven por delante.

La pena es que no existe la marcha atrás y hay que seguir en un presente, que siempre estará con niebla a través del futuro.