DE VUELTA OTRA VEZ

Viene mi amiga y ex compañera de trabajo otra vez, el viernes, pues siempre nos hemos querido mucho y nos hemos llevado muy bien, aunque es como una hija, pero como tiene su parte infantil y al mismo tiempo es adulta, congeniamos mucho y me cuenta todas sus cosas y viceversa. Yo se que está preocupada por mi y quiere animarme el día, así que me ha emocionado mucho y estoy deseando de que venga. Ella siempre me daba buenos consejos, al igual que otras amigas, pero era porque se percataban de que me estaban engañando y yo no lo quería aceptar. Soy consciente de mi enfermedad, agravada notablemente y sin cura, por todo el salvajismo que tuve que soportar y que me degeneró otras consecuencias, ahora, el Señor me lleva cogida de su mano y no me quejo de tanto como me mima, para que no me falte de nada y pueda llevar mi carga de la forma más ligera.

En mi forma de pensar, nada ocurre por casualidad, pues fui libre para confiar y por mi ingenuidad lo creí todo, pero me golpearon vilmente y mi Padre intervino, para salvarme de seguir empeorando y enviarme un ejército de ángeles, que llevaré metidos en mi corazón lo que me reste de existencia, porque se volcaron conmigo y me sacaron de la cárcel más cruel y corrupta que jamás creí que existiera en un pueblo pequeño e insignificante, catalogado así por la cantidad de gentuza indeseable que habita en él y que no tienen nada mejor que hacer, más que matar y asesinar por la espalda sin ninguna clase de conciencia, aunque conmigo era sin esconderse y me daban de lado como si fuera una delicuente peligrosa. Son muy escasas las honradas que existen y muchas ni son de allí, por lo que no me extraña, que haya tanto delicuente, tráfico de drogas, enfermos mentales de tanto como consumen y canallas violentas que pegan, amenazan, insultan y son de un borrachismo impresionante. 

Hay de todo en todos los lugares, pero creo que ni en lupa, se encuentran otras gentes más malas como las que son ibañesas de origen, en su gran mayoría, empezando por la jefa suprema del mismo y su gran autoridad, para hacer lo que le da la real gana, por quienes desea favorecer saltándose todas las reglas de la legalidad y sin importarle un pimiento nadie, excepto ella misma y los que le interesa...

La alcaldesa de ese pueblo, deja mucho que desear y tiene su puesto en el juzgado, guardado por excedencia, para poder gobernar su amado antro de porquería y ser la dueña de hasta el aire que se respira por allí, junto a su equipo de seguidores, que se llevan todos de categoría... Aunque a la próxima vez ya no saldrá elegida, eso seguro...