UN BESO DE AMOR VERDADERO Y PASIÓN, NO ES COSA DE CERDOS

Siempre he deseado saber, lo que era un beso de amor y de pasión, por eso, cuando creí tener mi pareja, quise dárselo y nunca me dejó, porque decía que le recordaba la lengua de los cerdos, no pensé nunca, que quizás había dado demasiados a los mismos. Después, nunca sentía nada cuando le acariciaba los senos, solo le entraban cosquillas y si me ponía romántica, le entraba la risa recordando alguna cosa graciosa, que le habían dicho. Nada le gustaba, pues se quedaba como un témpano de hielo y a todo le ponía pegas, así que acababa fustrada y acomplejada, cuando era ella la que llevaba dentadura postiza, era más mayor que yo, llena de arrugas y con un mundo a cuestas, que desconocía, por eso, su comportamiento no era normal, sin embargo, a mi, que siempre ha sido mi mayor escrúpulo, el tema dental, no me importaba en absoluto lo suyo, ni sus imperfecciones, de tan enamorada como estaba. Me sacaba faltas en todo y eso, que el problema no era mío, pero ahora es cuando me he dado cuenta y me he preguntado muchas veces ¿pero...que clase de relación tuve con esta mujer?, y obtengo la respuesta al comportamiento extraño desde el principio, que me ha hecho ver la realidad, de que nunca me quiso para nada, excepto para utilizarme y hacerme todo el daño que pudo, incluso venderme, para intentar meterme en un centro psiquiátrico, a pesar de verme tan enferma e indefensa. Toda mi historia, está iluminada con el análisis que he hecho de ella y comprendo, que tenga obsesión por el sexo, pues en realidad, lo suyo no es tener una mujer lesbiana femenina, para compartir, pues no puede dar nada, o también puede ser, que tenga impotencia y fracase, porque no le puede gustar a nadie, ni por su exterior ni por un interior inexistente. Lo que tengo muy claro, es que la burla fue enorme y mi inocencia me hizo pensar, en que aquello era una relación, cuando todo quedaba en el mismo abrazo y el mismo roce y me conformaba, creyendo que eso, era hacer el amor. Ahora, que leo otras bitácoras he llegado a la conclusión, de que lo mió fue una tomadura de pelo al principio y una canallada al final, pero a ciertas edades en que ya se es mayor, la factura llega con muchos intereses y se acaba arruinada, dándose cuenta la gente, lo que se ha llegado a tener de riqueza y acabar quedándose sin nada y buscando sin parar, lo que ya tuvieron y no supieron valorar...