ESTAS AHÍ

En mi sueño te veo ahí, me estás esperando y de forma casual voy a tu encuentro, nos miramos profundamente y nos hablamos con nuestras miradas, nos damos cuenta de que somos la una para la otra y empezamos con una amistad maravillosa, en la que no pensamos más que en estar juntas, con una complicidad que nos enamora locamente. Vamos disfrutando de los momentos de cada día, tú vienes y yo voy, jugamos como dos niñas inocentes y de repente nos damos un beso, ese beso maravilloso que pone de manifiesto lo que sentimos en nuestro interior. Nos hemos vuelto a enamorar, pues tu eras desgraciada y yo tambien, pero ahora nada ni nadie, podrá romper esta cadena tan fuerte e indestrustible, que acaba de volver a nacer. Dame tu mano y coge la mía, vamos a pasear por las calles cogidas sin temor al que dirán, pues el amor no es un pecado, cuando sale del corazón, del alma y es verdadero. Quiero gritarlo mirando al cielo, que la gente nos envidie de ver cuanto nos amamos y de que somos felices, de que nosotras, somos un destino escrito en el libro del cielo, por eso cuando demostremos nuestros sentimienos, nos sonreirán, porque se daran cuenta de que somos almas gemelas, para amarse eternamente en las noches de soledad, tuyas y mías, empezando aquí en la tierra, para seguir después en el Paraíso.

Tú me llamas, yo te escucho y quiero correr hacia ti, pero hay que esperar un poco, porque no es la hora señalada, esa vendrá con algo de retraso, pero mientras llega, te llevaré en mi corazón, en lo más profundo de mi ser y en cada palabra en la boca de otras, será tu voz la que me suene y yo te diré ¡te he amado siempre y eres real!