Tú amor mío, eres mi resurrección, el apoyo que necesito, porque te amo más allá del infinito, más allá de cualquier galaxia, más allá de todo el espacio desconocido, eres mi chica, eres mi sol, eres mi sombra, eres mi alegría, eres mi sueño, eres mi dolor, eres mi llanto, eres mi locura, eres mi esperanza, mi horizonte lejano y también mi pasión...
Tus manos anhelo sobre mi piel, que me recorras toda entera con tus caricias, con tus labios, con tu mirada de profundo amor, para fundirnos las dos con nuestro espíritu y nuestro cuerpo en un solo ser....
Dame tu corazón y tu alma, tu forma de ser y la calma, regálame la dulzura, la ternura y el fuego de una mujer sin igual, dame tu boca y ábrela con la mía, gocemos de nuestros sentimientos y hagamos el amor durante toda la noche, hasta la llegada del nuevo día....
Corre hacia mi, sigo esperando y estoy aquí con las alas rotas, pero volando contigo entre el comienzo y el fin de mi vida, porque en mi mente existes y te llevo junto a mi a cada momento, en cada lugar, a través del reloj, del frío, del calor y en cada gota de lluvia, que me cala con tu presencia inexistente....
¡Oh amor mío!, cuando estés delante de mis ojos abrázame fuerte y no me dejes partir, hazme la promesa sagrada de dos mujeres enamoradas, pero cumplida ante la vigilancia divina, para ser felices y bendecidas....
Cuando te mire, te lo diré todo con el idioma del silencio y me responderás de la misma manera, pero cuando te susurre al oído mi frase más romántica y sincera, llorarás de felicidad, pues habrás vuelto a nacer al conocer a una mujer, diferente, especial, romántica, sensible y fogosa, a la que valorarás, amarás y cuidarás, como se riega a una preciosa rosa, pero del jardín de tu existencia, sin olvidarte, de que tú serás mi oasis en mitad de mi desierto y cada amanecer nuevo, te comeré a besos de tanto amarte.....